lunes, 22 de julio de 2013

¡Cuánto amo tu ley!


Publicado en www.AvivaNuestrosCorazones.com

En el Salmo 119 el salmista declara: "¡Cuánto amo tu ley! Todo el dia es ella mi meditación", al leerlo sentí como este versículo atrapó mi corazón y a la vez me confrontó grandemente porque esta no es una realidad en mi vida práctica. 

Considerando que se acerca la conferencia "Por Su Causa" y este año el tema es "Por el poder de su Palabra" creo que debo ir preparando mi corazón para todo lo que Dios quiere hablarme.

Anhelo que la Palabra de Dios sea mi meditación contínua, que mis pasos se apresuren a cumplirla y mi corazón la guarde como un tesoro. Es por eso que he decido hacer un recorrido por el Salmo119, el capítulo más ignorado de la Biblia (creo que por lo largo que es...jeje) y conocer a fondo todo lo que Dios quiere hablarme acerca de su Ley.

Hoy inicié con los versículos del 1 al 8:
1 ¡Cuán bienaventurados son los de camino perfecto (intachable),
los que andan en la ley del Señor!
¡Cuán bienaventurados son los que guardan sus testimonios,
y con todo el corazón le buscan!
No cometen iniquidad,
sino que andan en sus caminos.
Tú has ordenado tus preceptos,
para que los guardemos con diligencia.
¡Ojalá mis caminos sean afirmados
para guardar tus estatutos!
Entonces no seré avergonzado,
al considerar todos tus mandamientos.
Con rectitud de corazón te daré gracias,
al aprender tus justos juicios.
Tus estatutos guardaré;
no me dejes en completo desamparo.
A partir de este texto me sugen muchas preguntas que me confrontan y me hacen pensar en mi caminar con Dios y me ayudan a orar más especicificamente.
  • ¿Ando yo continuamente en la ley del Señor?
  • ¿Es mi deseo ser intencional/diligente en como puedo agradar a Dios en todos los aspectos de mi vida?
  • ¿Es mi testimonio intachable?
  • ¿Estoy buscando al Señor y Su Palabra con todo mi corazón?
  • ¿Soy agradecida cuando Dios me muestra alguna verdad o me confronta?
  • ¿Si no tengo la Palabra de Dios me siento desamparada?
Señor confieso que tu Palabra no es mi prioridad en muchos escenarios de mi vida, pon en mí un corazón que considere tu Ley primero que cualquier otra cosa. Llename de un ferviente anhelo por tí y que pueda entender que haciendo esto soy bienaventurada. Recuérdame que sólo la obra de Cristo puede hacer de esto una realidad en mi vida.

¿Me acompañas en este recorrido? ¡Anímate!

¿Tienes tus propias reflexiones o preguntas a partir de estos versículos? ¡Compártelas y deja un comentario!

1 comentario:

Emanuel Betances dijo...

Excelente iniciativa Betsy... Te acompaño :-)